La exposición Valencia 1750 gira alrededor del dietario manuscrito de un hidalgo -Ignacio Gilabert- que entre 1744 y 1751, anota los gastos de su casa en días determinados. Son los gastos de una familia de la alta burguesía en celebraciones, fiestas, ropas, pleitos, reparaciones en sus casas, alquerías y barracas, encargos a artistas, compra de loza de Alcora, etc…
A través de los gastos y sus fechas podemos reconstruir muchas costumbres del momento, desde reuniones donde se toma chocolate coincidiendo con determinadas fiestas, los dulces que se regalan en Navidad, la primera referencia a la tradicional ‘mocadorà’ o la también primera receta de horchata conocida.
Al respecto del chocolate, que en esos años solo está al alcance de pocos, el pequeño manuscrito incluye 17 recetas, posiblemente las primeras conservadas del mundo moderno.
Además de referir gastos, el dietario incluye algunos comentarios llenos de ironía sobre la vida cotidiana, la enseñanza o la religión, que dejan traslucir problemas de su época.
La exposición se articula en cuatro zonas, la primera está dedicada al marco político, social y cultural de la Valencia de mediados de siglo entre el final del reinado de Felipe V y el de su hijo Fernando VI, momento en el que han comenzado a asentarse las ideas ilustradas, a destacar en ella la escultura de Felipe V de Leonardo Julio Capuz, que se situó sobre una columna al principio de la Alameda y el plano grabado por José Fortea de la ciudad en 1738 basado en el dibujo del Padre Tosca, así como dibujos y bocetos en barro de Ignacio Vergara o el grabado de la portada del palacio del Marqués de Dos Aguas de Hipólito Rovira, entre otros.
El segundo tramo de la exposición recrea interiores burgueses del momento con obras de arte, mobiliario, indumentaria, artes suntuarias y aplicadas, destacando entre las piezas un Bodegón de Tomás Yepes, la vajilla Balzola, así como un rico conjunto de loza de Alcora, Talavera, Moustiers y China o un panel de azulejos valencianos mostrando una escena del servicio del chocolate.
El tercer escenario expositivo muestra escultura y pintura religiosa con obras del período de Evaristo Muñoz, Luis Domingo, Gaspar de la Huerta, José e Ignacio Vergara, entre otros.
El tramo final de la exposición muestra en una especie de zoco un conjunto de lo que el comercio podía ofrecer a los viandantes: libros, estampas, ropa, tejidos, encajes, menaje, medidas para cereal, aceite o vino, además de la evocación del taller de una familia de artistas: los Vergara.
La exposición reúne fondos del Museo de Bellas Artes de Valencia, el Museo Nacional de Cerámica y Artes Suntuarias González Martí, la Colección Espínola, el Archivo José Huguet, la Colección Victoria Liceras, el Museo de Bellas Artes de Castellón, la Real Academia de Bellas Artes de San Carlos, la Real Sociedad Económica de Amigos del País de Valencia, la Biblioteca Valenciana, el Archivo de la Diputación de Valencia, el Museo Chocolates Comes y diferentes colecciones particulares.